El descenso en el nivel del río Cazones ha comenzado a percibirse desde el día de ayer, el cauce que en su punto máximo alcanzó una altura máxima de 8.5 metros, lo que representa cuatro metros por encima de su nivel habitual.

Como consecuencia del crecimiento, se presentaron daños significativos en negocios y viviendas. Las labores de limpieza se han iniciado gracias a la disminución de la lluvia, permitiendo a los habitantes trabajar en la remoción de lodo y escombros en las zonas afectadas.

En Álamo, el nivel del agua también está bajando, aunque la emergencia persiste. Se ha comenzado a operar un puente aéreo con el objetivo de transportar víveres a las zonas más vulnerables. Más de 55 municipios del norte de Veracruz han resultado afectados por las fuertes lluvias asociadas a la tormenta tropical Raymond.

A pesar del descenso en el nivel de las aguas, en Álamo la situación continúa siendo compleja. En Poza Rica, la crecida provocó la muerte de animales domésticos y arrastró un gran número de vehículos, algunos de los cuales terminaron encima de inmuebles o postes. En cierta áreas, el nivel del agua superó los 8 metros, lo que obligó a la Comisión Federal de Electricidad a suspender el suministro eléctrico para evitar cortocircuitos.

Unas 700 personas han sido trasladadas a 10 refugios temporales en Poza Rica, mientras la Universidad Veracruzana instaló un centro de acopio y anunció la intención de reanudar clases en cuanto las condiciones lo permitan. En la colonia Granjas, los habitantes solicitaron apoyo tras reportar devastación en la zona.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *